Distracción

No había forma de imaginar lo difícil que sería. Me doy cuenta que me volví dependiente de su voz. El día es pesado y eterno y ... no logro distraerme para hacerlo más fácil. Una distracción. Eso necesito. Pero ¿cómo? ¿qué? 

Saber de la ausencia de mi presencia en él tampoco es sencilla. Eso gano por seguir viendo cada semana ese "borrador de ideas".

 Y ¿qué debería de hacer? ¿Hablarlo? ¿Decirle lo difícil que es a tan sólo a un par de días de tomar la decisión? Tan hipócrita no puedo ser. Además, si no logro controlar mi necesidad de hablar ... ¿no sería aún peor? 

Dependo de su voz. Incluso de su palabra escrita. Cualquier cosa para hacerme sentir que está presente en ese momento. Pero es extraño. Es incómodo. Es distinto. No es la charla de siempre. Y lo sabemos, pero no sabemos qué decir.

Una distracción. Con urgencia.